Son innumerables las ocasiones en las que podemos llegar a sentir que el rumbo basicamente se desvanece... Que donde teniamos el camino trazado, los pasos pautados, derrepente, desaparece el norte. La brujula del destino se estropea y en un leve espacio de tiempo nos desorientamos..
La gente es tan confusa en algunas ocasiones, tan mareante, y en ocasiones nos afecta.
Es logico que si el mundo que nos rodea se tambalea podamos sentir una minima desconexion de nuestro alquimista interno. Buscar esas manos que suelen agarrarnos, que nos empujan hasta equilibrarnos para dejar de sentir ese temblor en nuestros pies.
Es como aquel cuento de que los polos opuestos se atraen en el que el yin complementa el yan, pues dentro de una polaridad, siempre habra un vacio si no se encuentra la contraria...
Por ello no existe un dia malo, existe un dia desperdiciado... Los buenos dias no se viven, se construyen, se elaboran, se consiguen... No hay nada en esta vida regalado, ni siquiera las coincidencias lo son. Lo gratuito y fortuito no tiene la consideracion que deberia.
Hemos de luchar, pelear a cada instante, no dejarnos vencer.. Fragilidad, todos la tenemos, esos puntos debiles que la gente tiende a atacar cuando quiere herirnos, o cuando no... Subconsciente, que peligro tienes...
La fe, la esperanza y sobretodo la alegria... Son cosas que nos ayudan a construir esos dias no perdidos, no vividos en balde.
El tiempo sigue siendo lo unico que no podemos detener, recuperar, y que no deberiamos nunca perder...
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